En una emotiva celebración en la Fundación Fucformidm, ubicada en el corazón de Bolívar, se conmemoró el Día Internacional de la discapacidad, entre los oscilantes aplausos y la algarabía del barrio Santa Lucía, la jornada tomó un giro especial al proclamarse a la nueva soberana de la inclusión, la señorita Emilia Molina, representante de la discapacidad en Junín.

Los aplausos resonaban como una sinfonía armoniosa, mientras el barrio Santa Lucía se convertía en un escenario de constelaciones humanas. Emilia Molina, con su gracia esparcida como polvo de estrellas, ascendió al firmamento de la realeza inclusiva. Sus ojos, faros de determinación, irradiaban una luz única que guiaba a otros a través de la oscuridad de la ignorancia. Cada gesto, cada paso de baile, era una danza celestial que tejía historias de superación y resiliencia.
«Ser designada soberana de la discapacidad en Junín es un honor, es una oportunidad para ser voz de aquellos que, como yo, enfrentan desafíos diarios, quiero ser un puente para la inclusión y la comprensión en nuestra comunidad», describió Emilia Molina con una sonrisa que refleja la satisfacción de un logro alcanzado
«Esta proclamación es un paso importante hacia la visibilidad y reconocimiento de las personas con discapacidad en nuestra sociedad, Emilia es un ejemplo de fortaleza y determinación, y estoy segura de que representará admirablemente a nuestra comunidad», reveló con orgullo Rita Alvarado representante de la discapacidad en Junín
La Fundación Fucformidm se convirtió en el escenario donde se entrelazaron historias de superación y logros. La elección de la soberana fue acto simbólico, una afirmación de la importancia de reconocer y celebrar la diversidad en toda su magnitud.
El título otorgado a Emilia Molina es más que una designación, simboliza la unidad y fortaleza. Así, en medio de la música y la alegría, la Fundación se convirtió en un espacio donde las diferencias se celebraron y la inclusión se proclamó como un valor fundamental en la comunidad de Bolívar.
