Por: Nancy Zosa
La clasificación de basura en la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí (ULEAM) tiene dificultades relacionadas con la falta de conciencia y compromiso, limitaciones de recursos y presupuesto, y desafíos en la gestión y mantenimiento de los residuos provocando la acumulación de desechos y roedores. Sin embargo, con el compromiso adecuado de la comunidad universitaria y una planificación cuidadosa, estas dificultades pueden superarse y el proyecto puede tener un impacto positivo en la reducción de la huella ambiental de la universidad.
“No tenemos esa cultura de clasificar la basura en su lugar, creo que a pesar de que existan los tachos de basuras de colores, nosotros como comunidad universitaria, no seguimos estas indicaciones y a la larga nos traerá enfermedades contagiosas”, recalcó Génesis Pacheco estudiante de la carrera de Ciencias de la Educación.
En las carreras que componen el área de la salud, las cuales son Medicina, Laboratorio Clínico, Enfermería y Odontología, la clasificación de residuos se erige como el diagnóstico esencial para el bienestar ambiental. Cada diseño es un síntoma revelador, y cuenta la historia de las prácticas y decisiones diarias. La segregación meticulosa se asemeja a la interpretación cuidadosa de resultados de pruebas, donde cada componente clasificado es un marcador crucial para el estado de salud de nuestro entorno.
Ángela pico docente de fisiopatología de la carrera de enfermería afirmó que, en este laboratorio viviente de sostenibilidad, cada residuo tratado con cuidado es una muestra que contribuye al archivo de la salud planetaria.