Por: Génesis Loor
El espigón de Manta es como un imán que atrae a multitudes, pero a su vez es un jardín en el que cada acción ciudadana es una semilla de compromiso con la protección del entorno. En este lugar, se han instalado 18 tachos de basura y fundas para las heces de los perros, con el fin de mantener el espacio limpio y evitar la contaminación.
“Me parece una iniciativa muy buena, porque así se cuida la salud de las personas de la playa y se preserva la belleza natural del espigón”, comentó Romina López, una turista que visitó el espigón por primera vez, quedó encantada con el orden y la limpieza del lugar.
“Es un gesto de respeto hacia nosotros mismos y hacia los demás, porque nadie quiere ver basura o excrementos en un lugar tan bonito como este. Además, es una forma de educar a nuestros hijos y a nuestras mascotas sobre el cuidado del ambiente”, enfatizó Carlos Pincay un deportista que acude al espigón a trotar cada mañana.
El espigón de Manta es un espacio de reactivación económica y cultural, pero también es un espacio ambiental amigable, donde la ciudadanía tiene sombra y aire puro gracias a las más de 12 especies de árboles y plantas que se han sembrado. El espigón se conectará con el Mega Parque, que se construye en el sector La Poza y que será otro punto de encuentro para las familias y los amantes del deporte.