Por Jhon Mero
En la víspera del Día de la Tierra, los ciudadanos de Puerto López se unieron al comité “Manos que Aman” en un acto simbólico de gran relevancia. Juntos, sembraron árboles en el triangular cerca del Subcentro de Salud, un gesto que va más allá de la simple plantación. Cada árbol, meticulosamente colocado en la tierra, representa un compromiso duradero con el cuidado y la preservación de nuestro planeta.
“La siembra de estos árboles no solo añade un toque de verde a la ciudad, sino que también simboliza la unidad de la comunidad en la lucha contra el cambio climático”, vociferó Verónica Lucas, alcaldesa del cantón, mientras sonreía agradablemente. Al igual que las raíces de estos árboles se arraigan en la tierra, el compromiso de los ciudadanos se asienta en la conciencia colectiva, creando una red de apoyo para el medio ambiente y las generaciones futuras.
Cada árbol plantado en el triangular es un recordatorio visible del poder que tiene cada individuo para marcar la diferencia. Esta iniciativa ha demostrado que, cuando la comunidad se une en un objetivo común, los resultados pueden ser tan sólidos y frondosos.
En este Día de la Tierra, Puerto López ha demostrado que la acción local puede tener un impacto global. La siembra de semillas no solo beneficia a la ciudad en sí, sino que también contribuye al bienestar del planeta en su conjunto, siendo esta celebración la excusa perfecta para qué la comunidad se una a este movimiento.