Por Miguel Zambrano
En el ajetreado entorno académico de la universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí (ULEAM), un hombre de negocios decidido ha encontrado su propia fórmula para el éxito. Al igual que un agricultor hábil, Luver Macías ha plantado las semillas de un negocio lucrativo vendiendo avena polaca a las afueras de la universidad.
“Hace 18 años que comencé a vender avena polaca. Ha sido una travesía larga y gratificante, y lo más importante es que ha sido la fuente que ha mantenido a mi familia”, aseveró Luver con una mirada llena de nostalgia y orgullo en sus ojos.
Como un arquitecto que construye su sueño sobre tierras fértiles, don Luver ha encontrado su nicho en medio de la competencia feroz. Su puesto de avena polaca se ha transformado en un faro de oportunidades que atrae tanto a los estudiantes como a los profesores.
Con su triciclo pulido y reluciente, este visionario emprendedor ha sabido convertir la avena polaca en un sol naciente para los hambrientos que pasan por el lugar.
“La avena polaca es una opción saludable y económica que se adapta perfectamente a nuestro ritmo de vida en la universidad, además la calidad y el sabor son inigualables”, puntualizó Jair Alcívar estudiante de la ULEAM, mientras salía camino a su casa.