Por: Deivis Sabando
En la calle universitaria 8 de la ciudad de Manta, reside una artista que hace magia con las manos, Carolina Mendoza, experta en dejar tu rostro como una muñeca, se une a esta camarería de emprendimientos, con el único propósito de poder costear sus gastos, ya que la universidad y la comida le es muy complicado pagar.
“Es toda una experta en lo que hace, su profesionalismo y sus valores la han llevado hacia donde se encuentra hoy, estoy super orgullosa de ella, puedo darme el lujo de decir que tengo amigas luchadoras y sobre todo trabajadoras”, aseveró Claudia Quimis, estudiante de derecho, mientras separaba una cita.
“Esto es muy importante para mí, de esto vivo y pago mis cosas, quiero agradecer a mi madre, por darme valores valiosos e indispensables para el diario vivir, eso es lo que me ha llevado lejos, seguir los sabios consejos de mi reina”, reveló Carolina Mendoza, emprendedora, mientras se disponía a ordenar su sala de estudio de maquillaje.
Apoyar a los emprendimientos, especialmente aquellos liderados por estudiantes que anhelan forjar su camino hacia el éxito, es como plantar semillas de oportunidad en el fértil suelo del futuro, donde cada pequeño brote representa un rayo de esperanza que florecerá en un próspero jardín de innovación y crecimiento.