Por: Gabriela Macías
El sombrero de paja toquilla es un símbolo de identidad, cultura y tradición ecuatoriana, es el país donde se origina esta obra de arte que ha conquistado a miles de turistas que visitan el Ecuador, llevándose esta prenda elegante y de calidad.
Bryan López propietario del local “Melbray”, relata que el funcionamiento de su negocio es de lunes a viernes de 7h00am a 08h00, siendo un negocio en casa, donde tienen la oportunidad de tenerlo abierto hasta ese horario y un punto a favor es que está ubicado en la vía principal.
“El negocio que tengo es junto con mi pareja, iniciamos de poquito a poquito para hoy logar lo que teníamos en mente, aparte de vender el sombrero también tenemos en nuestro local adornos en cerámicas. Las ventas siempre están variando por la crisis económica que vive el país, afectado a todos los negocios, pero si hay días en que corro con suerte porque las ventas son buenas”, puntualizó López, mientras mostraba variedad de sombreros.
El propietario del negocio vende el sombrero a $35 sin la caja y con ella a $40, porque manejan un tejido más fino, valorando la calidad y los puntos de tejido con los que se elabora.
Prenda que transcienda con el tiempo, representando la diversidad, creatividad y la historia de un pueblo ecuatoriano. Es tejido con manos de artistas, en donde se viste con orgullo y es un buen obsequio que se regala con respeto y cariño.
Wilson Caicedo, amante a los sombreros, pero en especial el de paja toquilla, aseveró, “no hay otra prenda mejor que nos represente al ecuatoriano, al manabita y al montubio, como lo es el sombrero de paja toquilla”.