Por: Jahiline Díaz Fernández
En la ciudad de Manta, los Pitbulls, considerados una de las razas caninas más polémicas, generan debates en diversas comunidades, donde algunos los ven como mascotas comunes.
Julio Campuzano, residente mantense y entrenador de dos Pitbulls, destacó mientras dirigía el entrenamiento de dos canes que, debido a sus características físicas, especialmente su musculatura, estos perros suelen ser percibidos como un riesgo, sobre todo a medida que envejecen.
Campuzano señaló que la agresividad en los perros, incluyendo los Pitbulls, está vinculada a factores como el entrenamiento deficiente, la socialización inadecuada, la negligencia de los propietarios y el entorno de crianza. Con firmeza, destacó que etiquetar a los Pitbulls como intrínsecamente peligrosos puede conducir a políticas que no abordan las verdaderas causas de la agresión canina.
El experto enfatizó que la clave para abordar el potencial peligro de los Pitbulls radica en la educación y responsabilidad del dueño. Por ello, recomienda medidas que fomenten la tenencia responsable, la socialización temprana y un entrenamiento adecuado, alegando que estas prácticas pueden reducir significativamente los riesgos asociados con cualquier raza de perro. “Centrarse en la educación de los propietarios y abordar problemas conductuales puede cambiar la percepción pública sobre los Pitbulls, permitiéndoles vivir vidas saludables y felices en hogares responsables”, concluyó Campuzano.
Así, estos canes, más allá de la controversia que los rodea, son como capítulos inexplorados, aguardando ser comprendidos en su totalidad, ya que con la educación y entrenamiento adecuado, revelan su verdadera esencia como compañeros leales y equilibrados.