Por: Valentina Andrade
En un emocionante hito gastronómico, la exquisita «tonga manabita” se presenta como un patrimonio cultural. Rocafuerte es el cantón más visitado considerándose un lugar mágico al ser el anfitrión de la tonga.
Una tradición que ha deleitado los paladares de los manabitas durante muchos años ha sido reconocida oficialmente como un tesoro culinario que simboliza la identidad gastronómica de la región.
La tonga manabita es un platillo único que combina sabores auténticos de Manabí. Se elabora a base de hoja plátano verde, arroz, seco de gallina, salsa de maní y deliciosos condimentos locales que resaltan su sabor característico. Su preparación, que ha sido transmitida de generación en generación, es un reflejo de la tradición y el amor de los manabitas por la buena comida.
“La tonga es una de mis comidas favoritas, siempre los fines de semana busco comerme una porque puedo compartir ese plato con mi familia”, enfatizó Leonela Arcentales, mientras una sonrisa se reflejó en su rostro.
“Cada vez que pienso en Manabí pienso en una tonga, sus combinaciones de sabores hacen un plato exquisito, es un plato económico y viene bastante para comer dos personas”, afirmó Belén Moreira mientras se sentaba a deleitarse un exquisita tonga.